Ya hace años que corría la voz de que aquel mito de los 10 mandamientos estaba muy de capa caída, pero yo, corazón de buen alma, aún creía que lo de mentir estaba feo.
Pero ahora me entero que hasta gente tan seria (y tan pía) como el Molt Honorable dice pagar personalmente (en metálico, ¿eh?) unos trajes en Madrid, precisamente un día en que no se movió de la Comunitat Valenciana, o que puede decirle a una persona que "la quiere un huevo", pese a que juró no conocerla de nada. ¡Que cosas mas raras pasan!
Qué curioso, acabo de subir una historieta sobre este tipet a mi bitácora.
ResponderEliminarCada día estamos más cerca, y sin mariconadas.
¿¿¿¿Le has hecho tú el lifting de napia????
(¡Capaz!)
Me alegro de que seamos cada día más quienes nos damos cuenta de que estos tipos nos están tomando el pelo. Lo que más me indigna es que, por lo visto, nos han tomado por tontos.
ResponderEliminarY si, el lifting es mío. En algo nos tenemos que entretener los señores mayores.
Efectivamente. compañeros, nos toman por tontos. Ahora resulta que es lo mismo una anchoa que un traje y que existe una cosa que se llama "coecho impropio pasivo". O sea, nada.
ResponderEliminarA la carcel sólo vamos los de a pie.