viernes, 21 de diciembre de 2007

El color del Mediterraneo

Aprovecho un claro en la lluvia y el frío de estos días para pasear junto al mar, donde las casas de pescadores de principio del siglo pasado se mezclan con las nuevas urbanizaciones. Nada que ver unas con otras. Fotografío los blancos, los rojos, los ocres de esas casitas que están en peligro de desaparecer por que, por lo visto, invaden la zona maritimo-terrestre, mientras que los villones de primera fila recien contruidas a punta de pelotazo siguen tan tranquilas.


Como contraste me encuentro también los restos de los chiringuitos veraniegos, donde la gente joven se pone ciega en las noches de agosto y que, una vez hecho el negocio, se retiran dejando atrás desechos y basuras.
En lo positivo, me planteo iniciar una serie de fotografias donde se refleje en sus colores propios el paisaje de este Mediterráneo tan próximo y tan amenazado.