viernes, 5 de abril de 2013

El día que Anna levitó

Anna es así. Siempre haciendo cosas raras, pero esta vez se pasó de la raya. Fué elevándose poco a poco, y hubo que cogerla de un pie para que no se volara, como un globo. Le he tenido que explicar que eso de la levitación, lo diga el papa Francisco o Iker Gimenez, es un timo, pero ella se lo cree todo y tiene tendencia a los experimentos. Dice que si lo hizo Santa Teresa, por qué no puede hacerlo ella. También tiene razón.