Mirando esta foto, que esquematiza un rincón absolutamente real hasta hacerlo
parecer un decorado, se me plantea la disyuntiva habitual sobre qué
debe ser la fotografía: ¿Documento
aséptico o interpretación? ¿La fotografía, es representación de la
realidad o la captura de la imagen lleva en si misma una intervención
del fotógrafo que distorsiona lo que se encuentra frente al objetivo?