martes, 20 de noviembre de 2007

Villa Alegría


Me llega un correo de Joan Antoni Vicent, que ha estado visitando mi exposición. Le ha gustado y eso me llena de orgullo, porque Joan Antoni es un fotógrafo de casta, con toda una historia de libros y exposiciones. Otro prejubilado feliz. Nos vimos hace poco y le alabé las virtudes (y comodidades) de la fotografía digital. Me dice ahora: “Crec que per aquests nadals em regalaré una Canon digital”.
Ha reconocido en una de las fotos “Villa Alegría”, que su hermano, Manuel Vicent, cita en “Verás el cielo abierto” y que yo ya fotografié por ese motivo. Cito:
“Me acabo de enterar de que el tornado que ha pasado por Denia se había generado primero en el litoral de Castellón. El mar de Moncofa se había salido más de doscientos metros y había invadido la casa de pescadores que mis padres alquilaron en el sangriento verano del 36 y que permanece en pie todavía. Es una casa muy humilde. Se llama Villa Alegría. El nombre está escrito en letras azules en el remate de la fachada. La casa se halla en primera linea, es blanca de cal, tiene una sola planta y sus rejas están hoy corroidas por el salitre. Alrededor de ella se han ido acumulando edificios, paseos con farolas y cafeterías hasta ahogarla, pero el mar le ofrece aún todo el horizonte. Ahora la suelen alquilar unos punkis muy tatuados porque esa casa conserva dentro el angel de la naturaleza.”