
Pese a las recomendaciones de Pepe Sanchez, me sigue atrayendo el paisaje, las vallas, esa ocultación de lo que hay detrás, lo cual deja siempre una puerta abierta a la imaginación. Esta vez en blanco y negro, por aquello del purismo y porque la valla en cuestón estaba tan impregnada del polvo rojo de esta zona que quedaban unos colores muy mortecinos. ¿Para que voy a decir nada más? ¿Pa cagala?
Si no sonara pretencioso, me parece una obra maestra, propia de algunos de los fotografos americanos de los 50. Como otras tuyas, que he podido ver en este blog y en otros sitios de Internet, que te voy rastreando. Incluso diría que tus paisajes en blanco y negro me gustan más que los decolor. Tienen más intensidad.
ResponderEliminar