sábado, 25 de octubre de 2008

Fidela: la foto del rincón


No me resisto a ampliar datos sobre la foto del post del pasado día 19. Se trata de una foto de inicios de los 70, en la mejor tradición neorealista de la época, en la que aparece Fidela, la teta Fidela, una mujer importante en los recuerdos afectivos de mis primeros años y de los de mis hermanos. En mi casa, "tetes" eran los hermanos mayores y "tetas" ,las sirvientas, aquellas mujeres que bajaban muy jovenes de los pueblos de la montaña, huyendo del hambre.
La teta Fidela era de Puerto Mingalbo y vivía en la casa colindante con la nuestra. Cuidaba con mimo, desde siempre y hasta que ellos y ella fueron muy mayores, de dos tíos míos solteros y los dirigía por la vida con mano de hierro. Mientras mis hermanos y yo fuimos pequeños, cuando mis padres salían por la tarde, pasábamos a casa Fidela, y ella nos contaba cuentos e historias, nos daba la cena y dormíamos instalados en unas mantas sobre la mesa de la cocina.
La foto se la hice en la sala de aquella casa, bajo un Corazón de Jesús qie a ella le gustaba particularmente y que te seguía con la mirada a cualquier rincón que fueras. A mi, de pequeño, aquello me parecía misterioso y me asustaba bastante.

Dia de la foto 2008


--> Después de unos días dedicado a temas más prosaicos, vuelvo a mi fotografía y mis enredos creativos. Subo una foto con varios años de vida (2005), tomada en un “Día de la Foto”, sarao callejero que la Agrupación Sarthou Carreres organiza en Vila-Real todos los años, con motivo de alguna de las múltiples fiestas locales que disfrutamos en este mundo de Yupi. En ese día montamos en plena calle un rudimentario estudio fotográfico y cualquier habitante del pueblo puede posar tranquilamente con la seguridad de que a lo largo del día tendrá gratuitamente su foto. Se trata de sacar la fotografia a la calle y de crear un archivo etnológico que alcanza en estos momentos varios miles de retratos de habitantes de Vila-Real.
La cosa, que ya viene celebrándose desde hace más de diez años, ha ido calando entre los villarrealense y las abuelas se plantan a primeras horas de la mañana frente al estudio, con el nietecito de la mano y esperando posar para nuestras cámaras. Por supuesto, si el almuerzo previo se prolonga, se quejan amargamente del retraso: “Doneu-vos presa, que faré tard a misa”.
En la foto, una niña y su muñeca, acaban de descubrir su vocación de modelo. Al fondo, el mundo real: una madre y su hijo les dan la réplica.