lunes, 21 de marzo de 2011

Fernando

Junto a la perplejidad socialista de la que hablábamos ayer, otra perplejidad, esta a la totalidad, de la gente joven, que mira la sociedad que les hemos preparado como algo ajeno, distante y bastante absurdo. En el fondo, les pasa como a nosotros: se han caído del mundo y ahora no saben por donde se entra, así que se quedan haciendo equilibrios en los márgenes. Tal vez no tengan ningún interés en volver a encontrar la puerta de entrada.